La diputada de Medio Ambiente y Promoción del Territorio, Marina Bravo, y el alcalde de Pizarra y diputado de Participación y Cooperación Internacional, Félix Lozano, inauguraron estos dos nuevos senderos.
La Diputación de Málaga ha concluido el acondicionamiento de dos nuevos senderos que unen Pizarra con sus pedanías de Cerralba y de Zalea.
Ambos suman unos siete kilómetros, que pueden recorrerse con seguridad a pie o en bicicleta. La red de senderos del municipio se completa con el de El Santo, que pasa por la ermita de la Fuensanta, por la sierra de Gibralmora, y que se puso en marcha en octubre del año pasado.
Marina Bravo ha destacado que desde la institución provincial se apuesta por la práctica del senderismo no solo potenciando la Gran Senda de Málaga, sino también, por ejemplo, apostando por el Corredor Verde del Guadalhorce, a través del GR-248, que comunica los parajes naturales de El Chorro y la desembocadura del Guadalhorce, y mejorando y poniendo en marcha senderos locales.
Las actuaciones en los dos senderos de Pizarra han incluido el desbroce de cañas y la instalación de paneles informativos, balizas y otros elementos de señalización.
Por su lado, Félix Lozano ha comentado que es muy importante que la localidad haya aumentado la oferta de senderos y de zonas de paseo del municipio, permitiendo la conexión a pie con sus pedanías de forma asequible para toda la ciudadanía, y proporcionando a sus habitantes y senderistas unas vías seguras para la práctica del senderismo.
El sendero Pizarra-Cerralba (SL-A 211) tiene una longitud de 2.887 metros, que transcurre en casi en su totalidad por tramos de pista, camino forestal o rambla. Arranca en Pizarra, al principio del Camino del Parador (junto a la carretera A-7054), cerca de la estación de tren y de la gasolinera, y concluye en Cerralba, en la calle Tangos, junto al parque.
Así mismo, el sendero que une Cerralba con Zalea (SL- A 212) cuenta con un recorrido de cuatro kilómetros, que arranca en Cerralba, junto a la zona verde del camino de Gibralgalia, transcurre unos 600 metros por asfalto y se desvía buscando el arroyo Casarabonela. Luego continúa por pistas de tierra, entre cultivos de regadío y zonas de pastoreo hasta llegar a Zalea, donde hay que cruzar la A-354 por el paso de peatones.
Desde octubre está operativo el sendero Subida al Santo de Pizarra (SL-A 213), que transcurre por la sierra de Gibralmora, desde la que se divisa buena parte del Valle del Guadalhorce y de la Sierra de las Nieves.