La cifra supera a los ingresos que aportan Madrid y Sevilla a las arcas del Estado con más conductores ‘cazados’ por el radar, casi 6 millones de euros.
Málaga es la provincia española (por encima de Madrid y Sevilla) en la que más conductos son cazados por los radares. El Gobierno central ha recaudado ya 5,8 millones de euros en lo que llevamos de año.
Por lo tanto, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha cobrado una media de casi 220.000 euros al día hasta el pasado 21 de noviembre gracias a las multas emitidas por los radares fijos. En esta respuesta no se muestran las multas recogidas por los radares móviles ni aquellos que gestionan otras entidades, por lo que la recaudación es todavía mayor si tenemos en cuenta estas plataformas.
El Gobierno ha detallado que durante estos primeros once meses se han formulado un total de 1.743.745 denuncias por los radares fijos. Denuncias que han recaudado 70.673.332,33 euros. Por otro lado, el Ejecutivo también ha desglosado en su respuesta al diputado socialista los datos globales de años anteriores desde 2011.
Según estos datos, por el momento quedarían casi 22 millones de euros en multas para situarse en los valores de 2016. No obstante, el Gobierno avisa que no se pueden comparar con los 70,66 millones de euros de este 2017 puesto que aún no se tienen los datos de diciembre, un mes que por norma general registra un mayor número de desplazamientos.
En 2016, el Gobierno recaudaba más de 92,3 millones de euros. Datos muy inferiores a los registrados en 2015, cuando se contabilizó una recaudación de 114,6 millones de euros. Mientras tanto, entre 2011 y 2014 se manejaron cuantías entre los 64,4 y los 80 millones de euros.
Según esta respuesta, las provincias que más aportan a las arcas del Estado son Málaga, con 5.876.635,38 euros, Madrid, con 3.921.714,59, Sevilla, con 3.653.771,36, Segovia, con 3.502.918,38 y Toledo, con 3.330.325,10. Dado que Málaga destaca como la provincia que mayor dinero aporta, Heredia ha denunciado que «los radares no están situados en los puntos negros de tráfico, sino en los lugares donde se pueden poner multas«. Por esa misma razón, critica que el Gobierno esté «metiendo la mano en el bolsillo a los ciudadanos, como demuestra su extraordinario afán recaudatorio«.