El informe forense rebate el del abogado de David Serrano, el dueño de la finca de Totalán
El informe forense mantiene que el pequeño murió poco después de la caída y no en las horas posteriores como sostiene el informe del abogado defensor. Éste apunta que fue un golpe de la piqueta de los bomberos la que provocó el traumatismo en la cabeza de Julen y causó el fallecimiento del niño.
La autopsia contradice así el informe que culpa a los bomberos. De todos modos, hay que esperar a la autopsia final.
Según el informe, la muerte del pequeño fue causada por un traumatismo cranoencefálico, ya que las lesiones que presentaba se situaban en el lado izquierdo de la cabeza y en la frente, unas heridas mortales compatibles con la caída por el pozo y los golpes que el niño pudo darse contra las paredes del mismo. Además, la autopsia revela que el pequeño tenía tierra en el estómago, el esófago y también entre las manos.
Este documento cuestiona de manera irrebocable la hipótesis de la defensa del dueño de la finca, en el que se culpa a los equipos de rescate y al uso de la piqueta quienes fueron los causantes de la muerte de Julen al gopear sobre su cabeza, siendo utilizada esta piqueta tres horas y media después de haberse producido la caída.
Sin embargo, según el informe, las heridas que provocaron la muerte de Julen no están en la zona superior de la cabeza donde podría haber incidido la acción de la piqueta, sino, en el lateral izquierdo y la frente.