La malagueña lanza ‘Un canto a la vida’ como homenaje a todos los que, como sus padres, trabajan en los hospitales.
Día tras día, la artista Vanesa Martín habla desde el confinamiento con sus padres, empleados ambos de hospital. Por ellos conoce de primera mano lo que es trabajar sin medios adecuados de protección frente al coronavirus y por ellos, y por el resto de héroes de esta lucha, ha querido aportar su ayuda.
«No quería quedarme de brazos cruzados. Por mis padres, que trabajan en la limpieza y el mantenimiento de un hospital, conozco la falta de material. Sentirlos desprovistos ante algo tan contagioso me motivó a querer contribuir», dice sobre la génesis de Un canto a la vida, cuyos ingresos irán al plan con el que Cruz Roja intenta paliar los efectos de la Covid-19.
No se trata de un tema nuevo, pero sí inédito. «Es como que las canciones tienen un momento de salir al mundo. Hace 10 días me levanté y pensé en esta letra, que es como si estuviese escrita para lo que sucede hoy«, cuenta a Efe sobre lo que define como «un himno al valor de la unión, la empatía y la solidaridad».
«Hay héroes al desnudo que desplegaron la bandera de la solidaridad, profesionalidad, conocimiento, valor y entrega. Personas que llenan de aliento los hospitales, avenidas, carreteras, supermercados, farmacias, las casas vecinas, que ahora se vuelven transparentes», escribe como análisis de la situación.
«Hace 10 días me levanté y pensé en esta letra, que es como si estuviese escrita para lo que sucede hoy»
Decidida a ponerle sintonía a ese esfuerzo, desde su encierro se puso en contacto con los músicos y con el productor y coautor del tema, David Santisteban, para trabajar a distancia «en un proceso todo casero pero desarrollado con mucho amor e ilusión» y alumbrar así el citado Un canto a la vida.
«Espero que la crisis saque lo mejor de cada uno y saber hacer balance. Es responsabilidad de todos reponernos y volver a la normalidad. Además, confío en que los científicos encontrarán una vacuna que nos haga sentirnos más protegidos», reflexiona, tras recordar a tantas personas que han perdido su trabajos y también «amigos» que han tenido que cerrar sus negocios.
Por todos ellos, tanto la canción como el videoclip estarán disponibles en la web de la artista, donde además se habilitará un enlace para facilitar la donación directa a la causa del Plan Cruz Roja RESPONDE, que pretende alcanzar a más de 1,3 millones de personas en diversos frentes, como el de las personas sin hogar y las residencias de la tercera edad.
«La soledad de esta enfermedad es terrible y me dan mucha pena sobre todo las personas mayores, que han vivido cosas muy duras como la guerra y la posguerra. Que ahora tengan que vivir esto…», se lamenta.
En su opinión, se trata de «una generación que ha luchado tanto por dejarnos un país más amable en cuanto a derechos, libertades sociales y progreso que se merecen que les devolvamos algo de todo esto».
«Hay héroes al desnudo que desplegaron la bandera de la solidaridad, profesionalidad, conocimiento, valor y entrega»
«Con esta motivación de la canción hemos pasado muy ilusionados la última semana de confinamiento«, relata Martín, quien dice llevar en cualquier caso «muy bien» el encierro, acostumbrada como está a los tiempos muertos entre giras y el proceso de composición de un álbum.
Además de en leer y disfrutar de sus perros, ocupa ahora su tiempo en empezar a arreglar canciones y construir más temas para su próximo disco, planes que ha anticipado después de que el coronavirus le trastocara los tres últimos conciertos de su exitosa última gira, en la que presentó su trabajo «Todas las mujeres que habitan en mí» (2018).
«Lo que peor llevo de todo esto es no poder abrazar a mi familia, a mis padres y a mis hermanos, pero queda un día menos de todo esto», apostilla optimista.