Una de las obras más interesantes del núcleo urbano es la Fuente de los Seis Caños, que se encuentra en un pequeño ensanchamiento de la plaza del pueblo y fue construida en piedra arenisca en 1628. La fuente está marcada por un frontón y dos pilastras. En el frontal se sitúan los seis caños, que son seis caras diferentes con las respectivas salidas de agua en la boca.
Los pilares carecen de base y a sus pies se sitúan unos voluminosos pilones, abrevaderos públicos y un graderîo, todo ello en zócalo de piedra. Los capiteles lo conforman una serie de tableros superpuestos con entrantes curvilîneos y angulosos.
La parte superior de la fuente es un frontón cerrado en cuyo centro está un escudo de armas nobiliario. Éste tiene una decoración vegetal con lîneas curvas y mixtas de estilo barroco del diecisêis.
Como conjunto arquitectónico se podrîa decir que presenta una decoración barroca con reminiscencias herrerianas.