Desde hace un tiempo está circulando por la red una supuesta “noticia” sobre una crema llamada Flexumgel de la que afirman ser el remedio para tratar las articulaciones
Muchas enfermedades que afectan a las articulaciones, como la artritis o la artrosis, son enfermedades crónicas, es decir, a día de hoy no existe un tratamiento que pueda curarlas.
En el caso de la artritis, el dolor se debe a que la membrana sinovial se inflama y produce un exceso de líquido inflamatorio. En la actualidad, los reumatólogos contamos con una amplia variedad de tratamientos que no pueden curar, pero sí controlar o “adormecer” la enfermedad, consiguiendo que los pacientes con artritis lleven una vida normal.
Mientras que en la artrosis, el dolor de las articulaciones se produce como consecuencia de un desgaste del cartílago articular, que actúa como el “cojín protector entre los huesos”, y al producirse este desgaste, los huesos se deforman y rozan entre sí, y en esta situación aparece el dolor. A día de hoy, este daño es irreversible y no tenemos tratamiento más allá de aquel destinado a reducir el dolor.
En ambos casos es recomendable consultar con su médico de cabecera o un reumatólogo, realizar actividad física de manera frecuente, seguir una dieta equilibrada, como la dieta Mediterránea, y no fumar, ya que todos los anteriores son factores que favorecerán el bienestar y la calidad de vida de los pacientes.
Dolor en enfermedades crónicas
Jugar con el dolor de las personas que sufren enfermedades crónicas es una actitud cuando menos deplorable. Desgraciadamente, en la red existen multitud de artículos como este que trata de vender “Flexumgel”, una supuesta crema milagrosa, enmascarándolo con una amalgama de supuesta información científica, económica y hasta jurídica, que lo único que hace es aprovecharse de la confianza que los pacientes pueden encontrar en un médico, con el fin de recuperar la salud.
En este caso ha sido mi nombre el que se ha visto suplantado, pero anteriormente fue el de otros doctores. Es más, este mismo artículo se puede encontrar en otros idiomas haciendo alusión a otro alumno y otros médicos
Desde estas líneas quiero dejar claro, que dicha publicación es un bulo con la suplantación de mi nombre que contribuye a una estafa. Y si la aclaración inicial sobre el dolor articular no ha sido suficiente, a continuación, insistiré en desmontar algunos conceptos que se usan y comentan en la “noticia”:
- La sepsis o septicemia se produce por una respuesta inmunitaria muy abrupta debido a la presencia de una infección bacteriana que alcanza la sangre. En esa situación, el sistema inmunitario se activa liberando sustancias a la sangre para combatir dicha infección, provocando una inflamación generalizada que puede llegar a desencadenar la formación de coágulos sanguíneos y empobrecer el flujo de la sangre, privando de oxígeno y nutrientes a los diferentes órganos del cuerpo. Se trata, por tanto, de un episodio grave debido a una infección bacteriana que nada tiene que ver con el desgaste articular de las enfermedades articulares crónica. En ningún momento puede considerarse que las articulaciones se pudren.
- El último Congreso Europeo de Reumatología tuvo lugar en Madrid del 12 al 15 de junio, tal y como se puede ver en la web oficial del Congreso EULAR.
El Instituto Nacional de Reumatología no existe
- En España no existe ninguna institución con el nombre de “Instituto Nacional de Reumatología”, ni tampoco el Ministerio de Salud. Por supuesto, la venta a través de “farmacia en línea” a la que aluden no es la forma propuesta por el Ministerio de Sanidad para la obtención de medicamentos.
- El estudio EPISER 2016, elaborado por la Sociedad Española de Reumatología, es el estudio epidemiológico sobre las enfermedades reumáticas en España, es decir, los datos procedentes de este estudio (que se presentaron en el Ministerio de Sanidad a principios de este año) muestran la prevalencia de las enfermedades reumáticas más frecuentes en nuestro país. Este estudio demuestra que 1 de cada 4 personas mayores de 20 años, en España, sufre una enfermedad reumática. Afortunadamente, el estudio no recoge datos específicos sobre la mortalidad porque, como he comentado con anterioridad, estas patologías, si bien, no se pueden curar, sí que pueden tener un buen manejo gracias a los medicamentos de los que disponemos los reumatólogos, de manera que las estadísticas de mortalidad de estos pacientes nada tienen que ver con los datos aportados en la supuesta “noticia”.
Desinformación sobre nuevos fármacos
- Capítulo aparte se merecería la “desinformación” que aportan al hablar sobre el proceso de desarrollo y aceptación por parte de las Autoridades Sanitarias españolas de un nuevo fármaco. Para que se hagan una idea, el descubrimiento de un nuevo fármaco es un proceso largo, que suele durar más de una década desde la investigación inicial hasta el lanzamiento en el mercado. Y que por supuesto, debe pasar los ensayos clínicos pertinentes, así como la certificación por parte de las autoridades reguladoras de que están de acuerdo con los datos que prueban la calidad, eficacia y seguridad del fármaco (en este enlace se puede leer información de la AEMPS sobre cómo se regulan los medicamentos y productos sanitarios en España). Además, una vez que está en el mercado, es obligatorio vigilar los posibles efectos adversos, así como las posibles nuevas indicaciones y comunicarlo a las autoridades sanitarias.
- Tampoco vamos a entrar en la “desinformación” sobre la financiación de los medicamentos en nuestro país, pero si algún lector tuviera interés, puede encontrar la información real en la web del Ministerio de Sanidad.
Por el Dr. Javier del Pino (Portavoz de la SER y reumatólogo en el Hospital Universitario de Salamanca), para Salud Sin Bulos.