La Feria y Fiestas de Pedro Romero de Ronda han concluido con un amplio balance policial. La Policía Nacional desplegó entre el 2 y el 7 de septiembre un dispositivo especial de seguridad en el que participaron más de 250 agentes. El resultado: 11 detenciones, 156 personas identificadas, 20 vehículos controlados y 38 actas tramitadas, de las cuales la gran mayoría —35 en total— estaban vinculadas con asuntos de drogas.
El despliegue de seguridad no fue casual. La Feria de Ronda es una de las citas más concurridas del calendario festivo andaluz, con miles de visitantes que abarrotan cada año el recinto ferial y el centro histórico de la ciudad. Este volumen de afluencia convierte a la ciudad en un punto de atención prioritaria para las fuerzas de seguridad, que buscan evitar episodios de violencia, hurtos o delitos relacionados con el tráfico y consumo de sustancias estupefacientes.
Once detenciones con perfiles muy diversos
El balance oficial refleja que las 11 personas detenidas responden a diferentes supuestos delictivos. En detalle, los agentes arrestaron a:
- Una persona con reclamación judicial pendiente.
- Dos individuos por atentado a agente de la autoridad.
- Dos personas acusadas de hurto, en colaboración con la Policía Local.
- Dos arrestados por quebrantamiento de condena.
- Dos más por resistencia y desobediencia.
- Un detenido por delito contra la salud pública.
- Un hombre por malos tratos en el ámbito familiar.
La variedad de los casos demuestra que el dispositivo actuó en diferentes frentes, desde delitos de violencia y seguridad ciudadana hasta actuaciones específicas contra la delincuencia relacionada con las drogas.
Prevención de hurtos y delitos sexuales
Según informó la Comisaría Local de Ronda, los agentes también dedicaron gran parte del esfuerzo a prevenir hurtos y a la vigilancia frente a posibles delitos de carácter sexual. En esta tarea participaron tanto policías uniformados como agentes de paisano infiltrados entre la multitud, lo que permitió detectar conductas sospechosas y actuar con rapidez en situaciones de riesgo.
En paralelo, se realizaron controles de tráfico y seguridad en los accesos a la ciudad, lo que se tradujo en la inspección de 20 vehículos. Estas actuaciones buscaban detectar tanto el transporte ilegal de sustancias como la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Un despliegue con medios terrestres y aéreos
El dispositivo de seguridad movilizó a más de 250 efectivos de la Policía Nacional, un número notable para una ciudad del tamaño de Ronda. Además de las unidades locales —Seguridad Ciudadana, Policía Judicial, Extranjería y Fronteras y Policía Científica—, se sumaron agentes de otras comisarías. Entre ellos, miembros de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), de la Unidad de Intervención Policial (UIP), de la Unidad de Caballería y de la Unidad Aérea, que aportó helicóptero y drones para la vigilancia del recinto ferial y sus alrededores.
La coordinación también se extendió a la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Málaga, con la que se realizaron cuatro inspecciones. En una de ellas se produjo la detención del individuo con reclamación judicial vigente. Asimismo, durante las fiestas los agentes mantuvieron contacto directo con los servicios de seguridad privada contratados por la organización de la Feria, lo que permitió reforzar la vigilancia en los accesos y dentro del recinto.
El caso más grave: un detenido con cocaína, MDMA y 100 pastillas
Entre las actuaciones más relevantes destaca la detención de un hombre de 40 años por un presunto delito contra la salud pública. El arresto se produjo cuando una patrulla sorprendió al sospechoso y a otros dos acompañantes dentro de un vehículo estacionado en un aparcamiento público, en las inmediaciones del recinto ferial.
Los agentes comprobaron que los tres hombres estaban consumiendo sustancias estupefacientes en el interior del coche. Durante el registro, encontraron en poder de uno de ellos un monedero con una notable variedad de drogas:
- Nueve envoltorios de MDMA.
- Treinta dosis de cocaína.
- Un centenar de pastillas de diferentes fármacos.
- 560 euros en efectivo.
El hallazgo reforzó la hipótesis de que no se trataba de un simple consumo, sino de posesión para el tráfico de drogas. Tras su paso a disposición judicial, el detenido ingresó en prisión provisional.

