El Plan de Vialidad Invernal de la Consejería de Fomento vela por más de 2.000 kilómetros de cuatro provincias especialmente vulnerables a este tipo de inclemencias meteorológicas
El invierno ya está a la vuelta de la esquina y, de hecho, los primeros copos de nieve ya han empezado a asomar en las carreteras andaluzas. Ante las inclemencias del tiempo, el Gobierno andaluz cuenta con un batallón que garantiza la seguridad vial en más de 2.000 kilómetros ante el riesgo de nevadas y heladas. El Plan de Vialidad Invernal se ha reforzado para esta temporada con un dispositivo formado por 417 operarios, 115 vehículos y 41 quitanieves que velarán para que la red viaria se mantenga en óptimas condiciones ante posibles temporales hasta finales del mes de marzo.
El plan engloba a las provincias de Almería, Granada, Jaén y Málaga, que son las de mayor riesgo de nevadas y heladas. En total, suman 2.021 kilómetros de carreteras de especial vigilancia por técnicos, que cuentan con vehículos de diferente tipo como retroexcavadoras, tractores, furgonetas, palas cargadoras o todoterrenos, así como con 6.648 toneladas de fundentes, sobre todo sal. Esta cantidad de depósitos es un 25,4 por ciento más que en la temporada pasada. Los recursos materiales están integrados por 41 quitanieves –cuatro más que la temporada pasada–, en su mayoría camiones equipados con cuchillas quitanieves y esparcidores de sal, que se verán reforzados con 115 vehículos –once más que en 2018– empleados durante todo el año para la conservación de las carreteras y que pueden servir de apoyo en las tareas destinadas a garantizar el tránsito de vehículos en condiciones de seguridad en invierno.
A esta dotación de material se suma una plantilla de 417 operarios, que desempeñan su labor coordinados desde 23 centros de conservación integral y centros operativos de control. Son 15 centros de Conservación Integral los que participen en este dispositivo, de los que Chirivel, Fiñana y Huécija pertenecen a Almería; Santa Fe, Guadix, Cúllar, Cádiar y Alhendín, a la provincia de Granada; Beas de Segura, Jamilena, Peal de Becerro y Úbeda, en Jaén, y La Viñuela, Antequera y Ronda, en Málaga. A ellos se suman los centros operativos en las provincias, situados en Huércal-Overa y Tíjola, para la provincia almeriense, y en Granada capital, Las Salinas y Las Víboras (Sierra Nevada), Puerto Lobo (Huétor Santiollán) y Baza (2) en Granada.
El resto de centros, con los que se cubre la totalidad de la red autonómica y que no presentan una demanda permanente de estos equipos, sí disponen de capacidad operativa para proporcionar, en caso necesario, la dotación y maquinaria para atender episodios de inclemencia meteorológica en el resto de Andalucía. Cabe recordar que el 60% de la red autonómica de carreteras se mantiene por debajo de la cota de 500 metros, donde por regla general no existen problemas de tráfico en el periodo invernal.
Los tramos de mayor altitud se localizan en las zonas montañosas, como Sierra Nevada y las sierras del norte de Granada, Jaén y Almería. La mitad de la red afectada por el plan de vialidad invernal se concentra en la provincia granadina (1.000 kilómetros), seguido de las carreteras jiennenses (564 kilómetros), almerienses (307 kilómetros) y malagueñas (140 kilómetros).
Marifrán Carazo ha destacado que tanto los trabajos de prevención como la rapidez de reacción ante la aparición de un fenómeno meteorológico adverso son «las bases del éxito de este plan de vialidad invernal», que primará, sobre todo, la seguridad tanto de los usuarios como de los trabajadores de los equipos. En este operativo destacan tres aspectos: el control de la información meteorológica, a través de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet); la aplicación de tratamientos preventivos y desarrollo de una actuación rápida y, por último, la información a los usuarios. Para minimizar los problemas, existe un servicio de información pública a través de los teléfonos de cada centro de conservación y la línea 902 33 30 92, que están operativos las 24 horas de los 365 días del año.
Las campañas que pone en marcha el Gobierno de Andalucía con ese objetivo suelen extenderse entre el 1 de noviembre y el 31 de marzo de cada año, aunque ese periodo puede ampliarse a los meses de octubre y abril si las olas o los frentes de frío se adelantan o se retrasan. En la zona de Sierra Nevada se opera hasta final de mayo en muchas temporadas.
Programa de actuación
En los casos en los que la red se ve afectada por las inclemencias meteorológicas, la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio interviene priorizando las vías de alta capacidad, las que dan acceso a áreas metropolitanas y a núcleos de población de más de 100.000 habitantes, los enlaces entre vías de alta capacidad de la red autonómica o la de carreteras del Estado y los accesos a transportes públicos (estaciones ferrocarril y aeropuertos).
Al existir carreteras de competencia autonómica, estatal y de diputaciones en Andalucía, es necesario que en las campañas de vialidad invernal las tres administraciones coordinen sus actuaciones para reducir al mínimo el número de tramos con retenciones y restricciones al tráfico y su duración, así como asegurar la atención a la ciudadanía usuaria cuando sea necesario. En ese sentido, Marifrán Carazo ha defendido esa coordinación y, dentro de este trabajo, ha ensalzado la labor de la Guardia Civil en materia de vigilancia y control de tráfico para adecuarlo a las condiciones de las vías, al igual que el papel que desarrolla Emergencias 112 Andalucía.