El pocero Antonio Sánchez ha ratificado la primera declaración que le dio a la Guardia Civil
Tapó el pozo con una piedra «gorda» de unos 15 kilos
La jueza no ha cambiado su calificación y el pocero sigue en calidad de testigo. Ha asegurado que se ha sentido acosado con las 40 preguntas de la defensa de David Serrano, el dueño de la finca, pero ha salido de la declaración tranquilo.
Después han declarado su ayudante y el profesional que cavó la zanja. El maquinista también ha ratificado su declaración.
La defensa del propietario sostiene que el pequeño pudo morir a causa de los trabajos realizados para sacarlo del pozo. La jueza ya le ha denegado todas las pruebas solicitadas y ha instado a los letrados a esperar algunos de los informes y diligencias que se están realizando