Una de sus hijas, al comprobar que la madre no se ponía en contacto con ella, denunció que estaba en paradero desconocido
La Asociación SOS Desaparecidos ha publicado una alerta por la desaparición de Ana María Ruiz Serrano, una mujer de 56 años a la que se le perdió el rastro en Málaga el pasado día 7 y que contaba con una medida de protección respecto a su expareja por violencia de género.
La entidad mantiene que se trata de un caso de alta vulnerabilidad, e informa de que su supuesto maltratador ingresó en prisión en septiembre después de darle una paliza de la que tuvo que ser intervenida por los golpes recibidos.
Una de sus hijas, al comprobar que la madre no se ponía en contacto con ella, denunció que estaba en paradero desconocido.
Al parecer, Ana María lleva varios años residiendo en Málaga y, aunque es una persona sin hogar, tiene teléfono móvil y siempre las llamaba, incluso si por alguna circunstancia se lo robaban se lo pedía a alguna persona para hablar con ellas.
Ha sido una de sus hijas quien ha denunciado su desaparición ante la Guardia Civil, en Madrid.
Según ha difundido SOS Desaparecidos, Ana María mide 1,78 metros, es de complexión delgada, pelo corto y rubio, tiene los ojos verdes y utiliza un andador para desplazarse.